🛤️
- Cristina Torreño
- 8 sept 2023
- 1 Min. de lectura
El peaje que pagué lo conoce el mar, conoce todas mis esquinas dónde a veces la respiración se queda en pausa. Ahora me cuesta confiar, ya no sé cuándo alguien me llama para darme un beso de judas o un abrazo sincero; y el corazón no puede quedarse en modo espera eternamente. La vida a veces es como una autopista de un único sentido en la que es peligroso quedarse detenido con el corazón averíado.



Comentarios