✒️🤍
- Cristina Torreño
- 5 may 2023
- 1 Min. de lectura
Tantos idiomas en el mundo y el tuyo es como la miel que abre la sonrisa. Estaba triste escuchando su ausencia, pero un día sonaste delante de mí y mi corazón empezó a hablar diferente. Sería incapaz transcribirte, no se puede; pero guardas un mielero en tu alma capaz de endulzar a cualquier trago amargo. Podría aprender cualquier palabra del mundo y traducirla como si fuese una llave que abre fronteras, pero a mí lo que me gustaría es saber hablar siempre contigo y conmigo. Como si fuéramos un momento que nunca nos gustaría que se perdiese en el tiempo, mírame de cerca tantas veces hasta que hablar en amor sea mi primera lengua.



Comentarios