Piruetas del corazón en un ojo de gato

Dicen que el puente entre los sueños y la realidad, se llama "el hacer". Pero sin la mirada de gato, no sabría ni cómo unir un pedazo de cariño con este mundo de hombres. Sin ella, tampoco conocería cómo apartar las pesadillas de los sueños, al menos antes de que se rompiese el puente. Y es que cuántas piruetas nos hace el corazón antes de que podamos ver algo.